Hace casi 40 años, en diciembre de 1978, estuvo a punto de desatarse uno de los conflictos bélicos que podría haber cambiado para siempre la historia de Chile y Argentina. El tema territorial sobre las islas Picton, Nueva y Lennox, eran el objetivo que quería recuperar el Estado argentino, frente a un Chile que al igual que el país vecino se encontraba viviendo una de las dictaduras más sangrientas de su historia. Esta es la cuasi guerra que el historiador Arturo Rojas, proveniente de Valparaíso, ha venido a investigar a la región, tomando relatos de los propios protagonistas.
Este profesional que además es oficial del Ejército de Chile, trabaja en la institución en temas culturales que han sido los que siempre le han interesado. El libro que se encuentra escribiendo llevará por nombre “Conflicto Chile Argentina 1978. El relato de los protagonistas” es un proyecto personal que pudo financiar gracias a un Fondo del Libro del Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, que es el que le permitió llegar hasta esta zona austral en búsqueda de los antecedentes.
El interés de este autor por este tema cuenta que nace desde joven y sostuvo: “Mi abuelo llegó al grado de suboficial mayor en el grado de la Armada y le correspondió estar en Puerto Williams durante este proceso”, contó el escritor.
Entre sus viajes que ha realizado por la región llegó hasta Tierra del Fuego para conversar con algunos de los que estuvieron involucrados de jóvenes en este enfrentamiento que estuvo a sólo minutos de producirse.
“El año ‘78 no fueron sólo los militares los que estuvieron sirviendo, sino que también hubo civiles y muchos de ellos no lo olvidaron. Aquí la gente de la isla voluntariamente fue a presentarse y hasta el día de hoy no se ha hecho un reconocimiento”, planteó el historiador que mantiene la idea de realizar con este trabajo además un homenaje a los civiles que estuvieron dispuestos a dar la vida por Chile.
Por otra parte, el autor conversó con algunos de los protagonistas y relató “He podido recabar testimonios muy emotivos, de personas que se han emocionado al recordar esos momentos de alta tensión. También tuve la posibilidad de estar en las trincheras y muchos al ver las imágenes tienen ese recuerdo”.
Para concluir, Rojas, sostuvo que es necesario contar estas historias, sin ninguna animadversión política, sino para saber más de nuestro pasado reciente, el cual muchas veces desconocemos.
Fuente: La Prensa Austral
