Nuevamente concurrió a prestar atenciones a los migrantes extranjeros que residen en Tierra del Fuego la Pastoral de Migraciones del Obispado de Magallanes, dispensando sus servicios en la antigua Casa Parroquial de Porvenir, a un costado del Templo Salesiano San Francisco de Sales. En esta oportunidad, durante el pasado sábado, se realizaron sobre 50 atenciones a otros tantos inmigrantes, reseñó el párroco fueguino, padre Alejandro Fabres, quien difundió la invitación a los interesados.
Cabe recordar que ésta es la única instancia que atiende en la provincia isleña a los numerosos inmigrantes de distintas nacionalidades que viven y trabajan en este territorio -que se estiman en unos mil-, principalmente en la capital comunal, donde suelen ejercer trabajos de temporada. Hace poco más de un mes, el Servicio Nacional de Migraciones (Sermig) reconoció que no tenía presencia en la isla.
Por lo anterior, ese servicio anunció que iba a protocolizar un acuerdo con la Pastoral para concurrir en conjunto a prestar atenciones oficiales a los residentes que aún no consiguen nacionalizarse, lo que aún no se concreta. Las últimas prestaciones fueron asesoramiento en trámites migratorios y una charla a las mujeres migrantes sobre política migratoria y género. Gracias a la obtención de recursos de un proyecto OIM (Organización Internacional de Migrantes), la Pastoral de Migraciones vendrá más seguido, siendo en octubre su próxima visita, anticipó el sacerdote.
