El rector de la Universidad de Magallanes, José Maripani, firmó la carta de adhesión a través de la cual la institución académica se suma al programa “Vuelo Limpio”, impulsado desde el año 2021 por la Agencia de Sostenibilidad Energética y la Junta de Aeronáutica Civil, organismos dependientes de los ministerios de Energía, y Transportes y Telecomunicaciones, respectivamente.
El objetivo del programa es avanzar en una transición energética con combustibles más limpios para la aviación y ajustarse a los estándares internacionales propuestos por la Organización de Aviación Internacional. Ya se asociaron compañías aéreas como Ecocopter, JetSmart, Latam Airlines y SKY, como también la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA), la Asociación Chilena de Líneas Aéreas (ACHILA), la concesionaria Nuevo Pudahuel, Airbus, Copec, la Universidad Católica de la Santísima Concepción y la Universidad de Concepción.
El rector José Maripani expresó que la producción de e-combustibles es algo muy nuevo en el mundo y una de las primeras plantas pilotos está en Magallanes, al recordar la instalación piloto Haru Oni de HIF que costó US$75 millones. Además, la UMAG tiene el primer laboratorio de e-combustible para testear la calidad de nuevos combustibles el que fue desarrollado con el apoyo de HIF, ante lo cual visualiza positivas opciones para contribuir al objetivo del programa “Vuelo Limpio”.
“Nosotros como universidad creemos que la Región de Magallanes puede ser un hub de descarbonización, pero desde el punto de vista industrial y también desde el punto de vista de los recursos naturales, al considerar las reservas de bosques, turberas y de bosques marinos como las algas que contribuyen a captar CO2”, señaló Maripani.
Agregó, además, que “tenemos que contribuir a poder valorizar estos recursos naturales y puedan también, de alguna manera, ser considerados en los bonos de carbono que el planeta está utilizando o en los desarrollos de capital natural que está llevando adelante el Banco Interamericano de Desarrollo”.
Martín Mackenna, secretario ejecutivo de la Junta de Aeronáutica Civil, destacó el aporte que puede hacer la Universidad de Magallanes desde una región donde se está impulsando la industria del hidrógeno verde. “Están las condiciones y además mucha capacidad técnica que es muy importante y está de la mano con todo el trabajo de esta universidad”, acotó.
Explicó que el programa tiene distintas mesas de trabajo y la UMAG podrá participar y trabajar en pilotos en el tema de certificación, considerando que la producción depende más de los privados, de empresas como HIF y otras. “La UMAG será clave en entregar el soporte de capital humano y de servicios como la certificación y laboratorio”, concluyó.