Sergio Márquez, de 71 años, tenía que comprar agua a un camión aljibe o esperar a que la Municipalidad de Porvenir le donara el recurso. Lechugas, acelga, cilantro y otras hortalizas sufrieron la consecuencia inmediata de la escasez hídrica. Una historia de cosechas perdidas que también padecieron sus vecinos, y que hoy tras la construcción de un pozo subterráneo comunitario podrán, por primera vez, asegurar el éxito de la próxima cosecha y entregar productos frescos a los habitantes de la isla grande de Tierra del Fuego. Y tan sólo tienen que abrir la llave.
El pozo construido en la parcela de Sergio Márquez tiene una profundidad de 70 metros, y a través de una red de tuberías beneficiará a las parcelas aledañas. En total cinco familias y más de cuatro hectáreas que podrán regarse permanentemente a una velocidad de dos litros por segundo.
El costo bordea los 16 millones 660 mil pesos, una cifra inalcanzable para la mayoría de los pequeños ganaderos y agricultores de la zona.
“Es un sueño hecho realidad. Era imposible que nosotros pudiéramos financiarlo, ahora tenemos que cuidarlo y devolver la mano con productos de calidad, faltan más hortalizas en la isla y la gente prefiere lo fresco y sano. Es muy difícil para nosotros pagar esa plata, sin el apoyo de Indap y el gobierno regional sería imposible”, explicó Sergio Márquez.
María Huentelicán, de 62 años, refrenda a su vecino. “Teníamos que comprar agua cuando podíamos esperar a que la municipalidad nos traiga. Ahora el pozo nos cambia totalmente la vida, ya no se van a secar las lechugas ni el cilantro”, precisó.
Diez kilómetros al norte, otro pozo, en la parcela de Juana Ruiz, de 74 años, devuelve también la esperanza. “Nos daba pena cuando las hortalizas se empezaban a poner lacias y a secar por la falta de agua, porque el agua hace todo, si hay, vamos a poder entregar mejores hortalizas y tener una mayor producción. Tener el pozo es un milagro que nos beneficia a todos”, dijo Ruiz.
A la fecha van tres pozos construidos en la provincia de Tierra del Fuego, y se espera al menos llegar a siete este año. El énfasis principal está en apoyar la construcción asociativa, con el fin de beneficiar a más productores. En este caso, los proyectos contemplan la instalación de guateros y otros acumuladores de agua para mantener una distribución pareja en el tiempo y un generador diésel de un rendimiento de 1,5 horas.
Los parceleros ayer abrieron la llave acompañados del seremi de Agricultura, José Fernández, la gobernadora de la provincia de Tierra del Fuego, Margarita Norambuena, y autoridades de Indap.
En la ocasión, el seremi de Agricultura, José Fernández, aseguró que el gobierno del Presidente Piñera tiene entre sus prioridades apoyar la agricultura familiar campesina. “Estamos comprometidos con la agricultura, creando conciencia, y socializando la importancia de apoyar a las familias campesinas de la Región de Magallanes”, precisó.
Asimismo aseguró que el Consejo Regional está consciente de la importancia de los recursos asignados a Indap: “Las obras están a la vista”, indicó.
Por su parte, la gobernadora de Tierra del Fuego, Margarita Norambuena, hizo un llamado a los agricultores a cuidar los pozos y a mantenerse organizados para darle un uso más eficiente al recurso, a su vez, señaló que el gobierno de Sebastián Piñera “es de puertas abiertas para los agricultores y al igual que en el primer gobierno del Presidente seguiremos apoyando el trabajo de la familia campesina”, resaltó.
Magallanes es una zona poco estudiada respecto al acuífero subterráneo, esto hace que el riesgo sea mayor y los costos de perforación aumenten. De ahí que Indap solicite a los contratistas un caudal asegurado sobre los 0,5 litros por segundo. Hasta ahora el éxito ha estado de parte de la institución y se han encontrado pozos de hasta dos litros por segundo en la región, todo una hazaña tratándose de una zona poco explorada.
Fuente: La Prensa Austral
